Sobriedad
Golpeando el
cráneo repetidas veces con el puño
Esperando que
en algún punto sienta dolor ajeno,
O vergüenza
por el acto, pero no el dolor propio.
Casi puedo
garantizar un esfuerzo por no amar,
Pero esto
sería ir en contra de los principios del mundo,
Y a nadie le
gusta que lo desprecien… ni al mundo.
Entonces
golpeo el cráneo otras diez veces,
Lo cómico es
que no existe forma de abrir los ojos,
Un despertar
sobre la continuidad del asunto,
La sobriedad
y la confusión durmiendo juntas…
Me muero de
envidia y de celos.
Si no
funcionaron los golpes puede que sacudiendo la cara.
Como un
perro. Como un pato. Como un hombre desesperado.
Y gritar
sólo asustaría a los vecinos
ensimismados en sus vidas.
No puedo ser
tan cruel como para arrebatarles su confort;
Entonces
mejor sigo siendo un hombre simple,
Y rezo para
mis adentros “Estoy bien, estoy bien…”
Así me ahorro
ir a la Iglesia, o hacer las paces con dios en la noche.
Lukas Guti.
20 de
febrero de 2015
Comentarios
Publicar un comentario