La tos
Ochocientos
mg de Ibuprofeno y cuatrocientos mg de Acetaminofén
No
lograron aliviar el corazón aplastado por mi humanidad.
Y
el corazón, aferrado a su ritmo se encogía en rediles de costillas;
Ocho
años bastaron para conocerte dos veces... Y no te vi en siete.
En
cambio viste todo de mí en dos días que pasamos juntos;
Quizá
fuera la cicatriz que se empeñaba en aplastarme día y noche.
O
tal vez el beso que te pedí a media noche y que nadie te había pedido...
Qué
fácil creer en ese momento que fui incapaz de cuestionármelo.
De tu llegada repentina, partiste dejando un
beso frío sin mirar atrás,
Entendí, pues, que desde mi cajita es peligroso salir por ahí solo,
con el corazón abierto en pleno invierno...
21/11/2017.
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