Reductores de estupidez
Los reductores de velocidad en esta ciudad tan pequeña son el claro ejemplo de una cultura que insiste erróneamente en poner obstáculos y prohibir para educar. Como cuando tiras la basura a la calle por no encontrar un basurero cerca y te quejas del sistema porque no hay contenedores cerca, convirtiéndote así en una basura de persona. Burros educados por otros no menos burros. País insostenible y decadente; Así somos.
"Treinta volcanes cubrirán los tiempos, y volveré". Yo y mi fatal utopía de ver este país en llamas porque nadie se lo merece.
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